
La Xunta y los Concellos integrados en el parque natural de las Fragas do Eume –Pontedeume, Cabanas, Monfero, A Capela y As Pontes– abogan por impulsar un Plan Reitor de Usos e Xestión (PRUX) que apueste por el desarrollo de actividades y usos y que ponga en valor los recursos sin comprometer la protección.
Esta fue una de las premisas puestas ayer encima de la mesa durante la reunión que mantuvieron la directora xeral de Patrimonio Natural, Belén do Campo, y la delegada territorial en Ferrol, Martina Aneiros, con los alcaldes de los cinco municipios incluidos en el parque natural de cara a la redacción del PRUX.
El encuentro –que iba a ser individual con cada regidor y que finalmente fue colectivo, a petición de los alcaldes– sirvió para intercambiar los problemas e intereses prioritarios de cada Concello y, de este modo, articular la herramienta que guiará el desarrollo de este espacio natural único en Galicia.
La directora xeral les adelantó que, como en el caso de los PRUX de los restantes parques naturales, se definirán distintas zonificaciones en las que se concretarán y determinarán los usos permitidos y posibles, como los agroganaderos, forestales, turísticos, empresariales, etc.; por lo que reiteró la necesidad de que todas las administraciones se impliquen en la redacción. También avanzó que contactará con los colectivos, entidades y asociaciones –medioambientales, culturales, turísticas, deportivas, etc.– de los cinco municipios para darles a conocer los objetivos del PRUX.
Delegación abierta
Por su parte, la delegada territorial señaló que “as portas da Delegación están abertas para atender todas as sensibilidades”, en aras de recoger y dar respuesta directa a las inquietudes por parte de los Concellos y sus vecinos.
Do Campo también reiteró su compromiso en citar y atender también a los representantes de los propietarios de los terrenos del parque, para trasladarles el contenido y objetivos de futuro del plan. Recordó que también se mantendrán encuentros técnicos con los departamentos sectoriales autonómicos para recopilar sus aportaciones; dado que el objetivo es conseguir un documento de gran consenso, pues –al igual que en los restantes parques– tendrá una vigencia de más de una década; por lo que se necesita que de respuesta a las necesidades actuales y futuras.