Mi cuenta

Las notificaciones están bloqueadas. ¿Cómo desbloquear?

OBAMA, ANTE EL PRECIPICIO

Obama ha ganado con solvencia unas elecciones a priori igualadas. Pero, más allá de la euforia y la lógica alegría que se desata tras cualquier victoria electoral, el Presidente reelegido no va a tener mucho tiempo para celebraciones. En términos tenísticos, podríamos decir que Obama tendrá que salvar otro match ball en apenas unos días.

El primero lo solventó con suficiencia y autoridad, venciendo a Romney. Y el segundo, más vale que lo gane también, porque, de lo contrario, el futuro pinta muy mal. Hablamos de evitar el “fiscal cliff” o precipicio fiscal. Un destino fatal al que parece abocado EEUU a partir del 1 de enero de 2013. En esa fecha, entrará en vigor un cóctel explosivo de subidas de impuestos y recortes de gasto, pensados para reducir el déficit aceleradamente. Pero la aplicación de esas medidas conlleva efectos secundarios perversos. Si finalmente se adoptan, la demanda interna americana podría desplomarse, y su economía volver a caer, arrastrando con ella a España, a Europa y al resto del mundo.

A esta situación se llega porque las políticas de gasto de Obama dispararon el déficit hasta niveles insostenibles. De hecho, tuvo que pedir en 2011 al Congreso que se le ampliase el límite de endeudamiento permitido, porque se había quedado sin dinero para afrontar los pagos del Estado. Finalmente, obtuvo liquidez pero a cambio de pactar con los republicanos (con mayoría en la Cámara de Representantes) las medidas mencionadas. Tras las elecciones, la correlación de fuerzas se mantiene. Obama tendrá que ser hábil negociando para cambiar de rumbo y evitar el precipicio.