Carlos Ares ya está aquí
Había expectación por ver y escuchar a Carlos Ares, un joven de 15 años que desde hace un tiempo venía “soliviantando” la atención del ambiente musical coruñés, no solo por su precocidad artística sino por la madurez que a sus años mostraba en sus trabajos de compositor e intérprete, que lo alejaban de los prototipos de figuras prefabricadas en las probetas del marketing musical.
Su concierto presentación en el teatro Colón, con asistencia de alrededor de quinientas personas, era un riesgo. Aún no tiene disco grabado y sus canciones no son conocidas más allá de un círculo reducido de personas que, eso sí, amplificaron las cualidades de este adolescente, creando la curiosidad pertinente. ¿Sería un bluf? Pues allí estaba él, Carlos Ares, en escenario grande, asumiendo riesgos, templando nervios y dispuesto a demostrar, en directo, toda su capacidad artística, que por lo escuchado es mucha.
Acompañado por una joven banda con Alan Ponte, a la guitarra; Fernado Fraga Guntín, al bajo; un jovencísimo Christian Delgado Villasuso, a la batería, y Sergio Delgado, al piano como director, Carlos Ares, dijo “aquí estoy yo”, con humildad, apoyado en la creencia de su valía, para ir desgranando el contenido de su próximo disco, “Complete”, al que esta dando los últimos retoques. Doce canciones en inglés, de largo recorrido e intensa combustión interna en su parte musical y literal, difíciles de interpretar si no se tienen como él destacadas capacidades artísticas. Temas increscendo, con largos intros, que fueron discurriendo con profundidad interpretativa, atrapando al oyente por su variedad e intensidad emotiva que él supo ajustar con sentimiento en sus fraseos vocales, acompañándose de la guitarra o sentado al piano.
Dos voces “angelicales”, las de Carmen Rey y Ángeles Dorrio, arroparon secuencias vocales redimensionando y estilizando el feeling de los textos, mientras que la escenografía “El ruiseñor”, con Susana Crespo, se encargaba de visualizar magníficamente el mundo musical de Carlos Ares, al que a partir de ahora, habrá que llamarle artista. Ya está aquí, llegó, canto y convenció. Ha nacido una estrella.
