EL EFECTO DE LA COLABORACIÓN

La crisis no ha dejado de golpear al comercio desde su inicio, del que ya ha transcurrido tanto tiempo que su efecto ha sido demoledor. Quizá en otras ciudades esa situación no sea tan perjudicial, pero en A Coruña, por el peso que el sector tiene en la economía, sí es muy preocupante. Solo hay que ver la cantidad de establecimientos que han cerrado para darse cuenta de que toda la ayuda que presten las administraciones públicas es poca, de ahí que sea imprescindible intensificar la colaboración entre el Ayuntamiento y los comerciantes. Estos piden ahora al gobierno local campañas de apoyo que sean efectivas, es decir, que sirvan para fomentar el consumo, un objetivo que, al parecer, no se ha conseguido con la estrategia de los besos. Lo mejor sería, por lo tanto, que ambas partes se reuniesen y diseñasen de común acuerdo los planes para el próximo año.