Cuatro deportistas vinculados a Ferrolterra tendrán el honor de componer la nómina de participantes en la primera edición de los Juegos Europeos que hoy arrancan en la capital de Azerbaiyán, Bakú. A semejanza de los Olímpicos, durante prácticamente dos semanas, 6.000 especialistas procedentes de medio centenar de países pondrán a prueba su destreza en una treintena de modalidades deportivas.
El halo de las grandes citas rodea un campeonato y es precisamente de esa experiencia de la que quieren disfrutar las triatletas Miriam Casillas y Tamara Gómez, del Triatlón Ferrol; el canoista André Oliveira, del Náutico Firrete; y el arquero Miguel Alvariño, del Sílex As Pontes, quienes ejercerán la representación de Ferrolterra en esta cita que en el caso de España contará con 240 deportistas, entre ellos, varios medallistas olímpicos como Saúl Craviotto o Joel González quien, precisamente, ejercerá de abanderado del equipo español en un desfile inaugural en el que estarán los cuatro participantes locales.
Tras participar en varias citas de las Series Mundiales en Oceanía, Asia y Sudáfrica, Casillas y Gómez hacen un alto para acometer una competición en la que serán las únicas españolas en liza. La prueba de Baku será una buena ocasión para seguir avanzando en su objetivo de conseguir alguna de las plazas –podrían ser un máximo de tres– con las que España contará de cara a los Juegos de Río.
Ese es sin duda, el fin último de buena parte de los deportistas que se reúnen en Bakú y al que también aspira un Miguel Alvariño que llega a la cita en el mejor momento de su carrera deportiva después de situarse entre los diez primeros en las últimas Copas del Mundo que disputó en Shanghai y Antalya. Registros que han afianzado su confianza para unos Juegos a los que acude a “aprender y disfrutar”, pero en los que no renuncia a nada.
También André Oliveira se presenta en esta prueba avalado por la séptima posición que obtuvo hace poco más de un mes en el Europeo senior en la misma especialidad –C-1 1.000–, en la que ahora aspira a codearse de nuevo con los mejores e, incluso, mejorar ese registro pues, aunque el campeón de esa cita –el alemán Brendel– sí estará, no lo harán algunos de los otros rivales que tuvo entonces.
