El anuario que sigue sacando a la luz los archivos ocultos que explican la historia de Ferrol
La trigésimo octava entrega de “Estudios Mindonienses” abre de nuevo el tesoro documental de la Diócesis

Una de las claves de la importancia de una publicación como “Estudios Mindonienses” es que democratiza el acceso a los archivos diocesanos a todas aquellas personas que quieran asomarse a sus páginas y bucear en sus artículos. Es una puerta a la historia de nuestros ancestros y, por lo tanto, a la nuestra propia en un momento en el que, como dijo su director Benito Méndez, “o futuro necesita orixes”.
“Non se trata de ‘romantizar’, senón de tomar nota de como os nosos antepasados resolvían os problemas e de como sempre podemos aprender da súa maneira de facer as cousas”, continuó, reflexionando en la presentación del trigésimo octavo volumen el pasado 12 de septiembre acerca de que “necesitamos volver ás orixes unha e outra vez; é dicir, avaliar a estética fundamental do edificio para, apoiados nela, mirar cara o futuro”.
Fundada en 1985, la revista de investigación en estudios históricos y teológicos de la Diócesis de Mondoñedo-Ferrol cumple 40 años siendo un referente para quienes busquen una fuente de consulta para estudiar la vida de Galicia. En sus páginas se publican artículos originales e inéditos, además de recensiones críticas de libros, y su pretensión última es “poner de relieve el patrimonio histórico, cultural y religioso” de los territorios diocesanos que “están sin estudiar y prácticamente inexplorados en muchos documentos y vestigios del pasado, a punto de desaparecer”, explican desde su consejo editorial, valorando que “sería una irresponsabilidad histórica dejar apagar para siempre esta mecha humeante en donde se enraíza nuestro ser como pueblo creyente en una tierra concreta”.
Documentos inéditos
En este número, además de la presentación del propio Méndez, figuran 17 artículos, una nota bibliográfica y 11 recensiones, todo ello firmado por un total de 16 autores y autoras, cifras que trasladan la buena salud de la que goza la publicación. “Nosotros hacemos la convocatoria todos los años y, como la gente ya nos conoce, recibimos muchos trabajos que pasan, en primer lugar, por el Consejo de Redacción para seleccionarlos”, explica el director.
“No podemos publicar todo el material el mismo año y, normalmente, dejamos artículos para las ediciones siguientes... Este número tiene más de 600 páginas y podría ser aún más extenso, pero no sería manejable”, sostiene, enumerando que se van agrupando por temas, en la medida de lo posible, y siempre figuran cuestiones como los orígenes, la arquitectura o la historia del arte.
No obstante, Méndez destaca “una cuestión muy importante que tiene ‘Estudios Mindonienses’, por lo cual es conocida la revista, fundamentalmente, y es que a lo largo de los años se han publicado muchos documentos inéditos que proceden el Archivo de la Catedral y otros que constituyen un punto de referencia para futuros investigadores; documentación que, a veces, no es accesible”.
Sin subvenciones de ningún tipo ni para publicar los volúmenes ni tampoco para digitalizarlos y que estén al completo abiertos a la consulta en línea, recuerda Benito Méndez que todos los que ponen su grano de arena “lo hacen de manera voluntaria, la retribución que reciben es un ejemplar y la compensación es la de publicar, que esté ahí su artículo, y que se conozca el tema”.

Es, por lo tanto, la Diócesis la que asume los 15.000 euros que suele costar la edición y el envío de los tomos a bibliotecas no solo de España, sino también de América Latina, Italia o Alemania, lugares en los que conocerán, asimismo, la historia de “los curas rojos” de Ferrol de la mano de Xaquín Campo Freire o se asomarán en los acantilados de Santo André de Teixido a la religiosidad popular a través del trabajo de Sergio Muíño Freire tutorizado por la profesora María Elvira “Mavi” Lezcano González, por citar solo un par de ejemplos del índice de contenidos.
La joya de la Diócesis
El archivo diocesano es uno de los tesoros ocultos a los que nos invita a entrar “Estudios Mindonienses”. Actualmente, explican desde el Obispado, una de las cuestiones que más tiempo les ocupa es que continúan gestionando “miles de solicitudes para acreditar la nacionalidad, sobre todo desde Sudamérica”. En paralelo, siguen pintando dependencias, instalando un nuevo sistema de seguridad y antiincendios, además de un sistema de control de humedad.
Han solicitado, además, una subvención al Ministerio de Cultura para la renovación del mobiliario de la sala de investigación y el despacho técnico, incluyendo, asimismo, varios ordenadores para el personal y “algo importante: un escáner, para poder así iniciar, poco a poco, la digitalización de nuestro archivo”, precisan, avanzando que “la intención es comenzar digitalizando los libros parroquiales, que son los que más consultas reciben” y, como en el caso de Elisa Abruñedo, pueden ser determinantes incluso para esclarecer una farragosa investigación policial.

La biblioteca que nacerá en el corazón de Esteiro
La antigua parroquia de Esteiro, entre la calle Carlos III y Españoleto, se convertirá en otro activo de la red de Bibliotecas diocesanas, pero todavía tiene que superar una serie de escollos económicos y burocráticos. El proyecto se dio a conocer a finales de 2023 y en la actualidad, explica la Diócesis, “es un tema que va muy despacio” para el que necesitan la colaboración de las administraciones al no poder afrontar con fondos propios la rehabilitación del edificio. Están en conversaciones con el Concello y pendientes de la valoración de Patrimonio de la Xunta, pero siguen recibiendo donaciones de colecciones “de especial interés para Galicia”. Incorporarían además al complejo el bajo y el primer piso de la rectoral contigua para salas de conferencias y lectura, entre otras.

