Vista la afición de los coruñeses, una bicicleta es de los mejores regalos que les pueden hacer. Y si encima es plegable y se puede subir al autobús, miel sobre hojuelas. El sorteo de una docena de estas es uno de las mejores impulsos a la movilidad sostenible de los últimos tiempos. Si quieren una, súbanse estos días al bus urbano.
